I would recommend running the below text through Google translate or similar (if you’re reading this with Google Chrome it might come as an automatic option), to better understand this very open tale of how the lockdown helped Lorena recover her mental health, rediscover herself and grow in self-confidence and strengthen her relationship with her daughter. At the end of it there’s a summary in English.

Volviendo más o menos a las primeras semanas de marzo… cuando todo explotó… y nos declararon en estado de alarma y nos dijeron cada uno a su casa y no salgáis. Con todas esas noticias de gente muriendo, gente desesperada por salvar a esas personas, pánico por todos lados … vamos una locura que no podíamos adivinar qué iba a suceder… a mi me pilló vamos con un ataque de pánico porque sabia que si enfermaba estaba en lo cierto que no saldría… porque… ¿por qué pensaba así? Porque tengo una enfermedad muy importante más muchas otras cositas que acabarían complicando mi vida si yo enfermaba. Soy diabética, con problemas de alergias, con asma, más algunas pequeñas tonterías que no me ayudaban en mucho… pero ahora viendo todo después de estos meses mi problema no era ese … era la tristeza.
Pues eso, entré en estado de pánico... lloraba porque tenía mucho miedo de enfermar, lloraba ante la incertidumbre de no saber qué iba a pasar… no entendía porque ahora tenía tanto miedo de morir si meses antes era lo único que deseaba porque mi vida no tenía ningún sentido y me castigaba yo misma y me culpaba de muchas cosas de mi pasado. Estaba perdida, me sentía hecha pedazos y pensaba que le hacía un favor a todos los que me rodeaban. Es cierto que diez días antes de empezar toda mi vida empezaba a cambiar... me sentía con más energía, comenzaba otra vez a coger las riendas de mi vida … y todo me cayó encima como una bomba y pensaba “no puede ser ahora que salgo del pozo me vuelven a meter obligada”.